(VIDEO) Cómo fue el milagroso rescate de las dos personas sepultadas por la nieve

Alfonso Lavado, guía de montaña, habló con AIRE LIBRE FM y brindó detalles del milagroso rescate de una pareja riograndense que había quedado sepultada por una avalancha de nieve en la zona de laguna Turquesa. El hecho sucedió el domingo por la tarde. En su relato, Alfonso brindó impactantes detalles de lo sucedido y por qué el hecho fue calificado como “un verdadero milagro”.
El entrevistado comenzó relatando que “sí, la verdad que fue un milagro cómo se dieron las cosas. Nos encontramos nosotros con un grupo de amigos en el Valle de Ollum. Es una zona que está a unos 15 kilómetros de la ciudad, detrás del Monte Olivia y el Cinco Hermanos. Es una zona que la gente va bastante a hacer trekking y esquí de travesía. Este domingo que fue un día tan lindo, con muy buena nieve, sabíamos que iba a haber mucha concurrencia, así que fuimos temprano con mis amigos para pasar el día por el valle. Habíamos estado esquiando todo el día, habíamos hecho múltiples bajadas y estando en la cumbre del Cerro Carbajal, ya para irnos a casa a las 4 de la tarde, estábamos ahí esperando el sol, que había una nubecita ahí que nos estaba tapando, así que nos quedamos ahí 10, 15 minutos esperando ese momento para tirarnos y ahí, en ese instante, empezamos simplemente a mirar el paisaje y pudimos divisar que en otra cara de la misma montaña había cortado una avalancha que hacía un rato no estaba”.
“Nosotros habíamos pasado por ahí más temprano y no había nada -apuntó-, entonces nos dimos cuenta que había pasado esa avalancha, estuvimos analizando un poco el terreno, sacamos un par de conclusiones y uno de los chicos divisó de arriba del depósito, donde se junta toda la nieve al final de la avalancha, divisó una mancha negra que se movía, que después terminamos identificando que era un guante, así que automáticamente cuando vimos eso, nos dimos cuenta que había alguien enterrado y activamos el protocolo de búsqueda”.
¿Y a qué distancia vieron ese guante?
“Calculo que habría unos 600 metros más o menos entre la cumbre y ellos estaban llegando a la cumbre del Cerro Carbajal, se les corta la avalancha y la avalancha los arrastra hasta el fondo del valle y los deposita en la Laguna Turquesa, así que quedaron ellos al fondo del valle y más o menos unos 600 metros, fue realmente una casualidad muy grande”.
¿Ustedes recorrieron esos 600 metros y cuando llegaron, la persona todavía movía el brazo o no?
“Estaban las dos personas enterradas, digamos que bien, conscientes, estaban hablando, cuando escuchamos que hablaban creo que nos entró una calma a todos, sabíamos que estaban vivos, por suerte no estaban enterrados muy profundo porque si no hubiese sido un trabajo un poco más extenso, nosotros contábamos con los equipos de seguridad, palas, para poder desenterrar a una persona en caso de avalancha, así que automáticamente lo que hicimos fue trabajar durante unos 30 minutos, nos fuimos rotando los tres para poder desenterrar a las dos personas, también contábamos con todo el equipo de mitigación para hipotermia, bandas térmicas, camperas extra, guantes extra, así que ahí mismo pudimos una vez sacar a las personas, asistirlas, secarlas, ayudar a recuperar la temperatura, cambiar la ropa.
Y la verdad que el helicóptero también fue una locura, cómo salió el rescate, una velocidad impresionante, a los 30 minutos de que sacamos a las personas de la nieve, aterriza el helicóptero en laguna, Turquesa y se lleva a las dos víctimas al hospital, así que salió todo muy redondo, muy prolijo”.
¿Ustedes se habían comunicado con la gente de la Comisión de Auxilio?
“Sí, automáticamente cuando vimos la mano moverse, uno de los chicos se puso a la tabla y se tiró y yo me quedé arriba en la cumbre que tenía señal para poder dar toda esa información clave para que la Comisión active el protocolo y bueno y el helicóptero también, así que por suerte yo ya había laburado con la comisión varias veces en rescates de avalanchas y en rescates de invierno, así que bueno estos entrenamientos están muy buenos, hace que todo esto fluya mucho mejor.
Es decir, fue un milagro que justo ustedes estaban en la zona, que pudieran ver a estas personas, porque no hubieran podido salir de esa avalancha.
“Sí, sí es imposible.
Ellos estaban completamente trabados, no se podían mover y la nieve está bastante una nieve liviana, la nieve polvo, que no es tan difícil de romper, pero así todo cuando la avalancha junta toda la nieve de la bajada y la acumula toda en el depósito, eso genera una compresión, así que toda la gente quedó completamente bloqueada en la posición en la que quedó, por suerte no tenían lesiones óseas, así que no tuvimos que lidiar con ningún otro protocolo, porque también podría haber tranquilamente haber habido alguna otra lesión de algún hueso roto o algo contra alguna piedra.
Por suerte no tuvimos que lidiar con eso, simplemente con la hipotermia y con el cavado de los dos pozos, así que bueno esto hizo que nuestro rescate sea rápido y seguro”.
¿Cómo fue que las personas podían seguir respirando, tapadas por la nieve?
“Creo que eso se dio debido a la densidad de la nieve, estaba bastante polvo y la profundidad en la que estaban las víctimas, las dos tenían la cabeza aproximadamente a medio metro de la superficie, lo cual no es tanto, entonces me parece que quizás por esa razón pudieron respirar durante tanto tiempo, comúnmente en las avalanchas después de los 10 minutos la posibilidad de encontrar a alguien con vida cae drásticamente al 50% y cada minuto extra va bajando velozmente.
Así que siento que si estar una hora bajo una avalancha y no morir es realmente un milagro”.
Sí, además el milagro es que se cruzaron con ustedes que son profesionales y que llevaban todo el equipo.
“Sí, fue una alineación difícil de entender, una vez finalizado el rescate nos juntamos con los chicos, con mis amigos y fue muy emocionante sentir que habíamos salvado dos vidas.
Las víctimas también estaban muy emocionadas de que nos hayamos salvado, así que fue un momento muy lindo también después tuvimos unos minutos ahí de llanto entre todos, fue muy emocionante.
Entiendo que están bien, se fueron del lugar solamente con un principio de hipotermia”.
¿Son comunes las avalanchas?
“Sí, sí, es una situación que hoy día se da más por un tema de concurrencia, hace diez años atrás no salía tanta gente a la montaña como lo hace hoy en día, entonces hay más probabilidades de que alguien active una avalancha, las avalanchas pueden caer de forma natural o pueden gatillarse por algo, por un paso de alguien o por un esquí.
Entonces al haber más volumen de gente en las montañas la cantidad de avalanchas obviamente es mayor y esto va a ir creciendo, los peligros van cambiando dependiendo de las condiciones de tiempo, el clima, las nevadas, los vientos, la temperatura, la lluvia.
Hay un grupo acá especializado de dos o tres personas que se dedican a pasar información sobre cómo se encuentra el manto, pero esto no llega a todo el mundo, hay mucha gente que no tienen idea de que esto puede pasar o que no cree que le vaya a pasar, entonces salen sin los elementos necesarios, como en este caso estas dos personas no tenían elementos, no tenían el detector de avalanchas ni la pala para desenterrar a alguien en caso de emergencia”.
¿Qué se les recomienda a las personas que quieren hacer este tipo de salidas?
“Lo primero que si no tienes el nivel y no estás capacitado para ingresar en un terreno nevado peligroso es contratar un guía o alguien que te lleve, que te guíe de forma segura y que te rescate en caso de accidente o cualquier problema que puedas llegar a tener. Y después la mejor forma de capacitarse es ir progresivamente, es informarse, es preguntar, acá en Ushuaia hay algunos grupos de Whatsapp donde se comparte mucha información sobre el terreno, nido y avalanchas, estar en esos grupos es importante porque uno puede tener un pantallazo de qué está pasando en el valle y las avalanchas no solamente se mueven con las nevadas que suceden sino con el historial.
Por último, Alfonso agregó: “A veces pasan cosas, de golpe sube mucho la temperatura, se derrite la nieve, después baja de golpe, se hace una costra de hielo, después le nieva arriba y esa costra de hielo no se pega a la nieve nueva, la nieve nueva es peligrosa, se corre, genera avalanchas naturales o pueden ser gatilladas.
La verdad que es un mundo el tema de las avalanchas, es difícil, hasta los más expertos mueren, pero bueno, hay formas de bajar el riesgo sabiendo bien dónde meterse y dónde no.
Acá por ejemplo hace un par de días que hay una alarma dando vueltas, una alerta de que las caras norte-noreste estaban peligrosas y bueno esto se dio justo en una cara noreste, así que de alguna manera el aviso está, pero no llega a todo el mundo que es lo que estamos necesitando”.

(🎙) Aire Libre FM 96.3: