Combustible ecológico: una empresa fueguina envió 25 metros cúbicos de pellets a Santa Cruz

La empresa Litoral Renovable ha realizado un importante envío de 25 metros cúbicos de pellets a Santa Cruz, un combustible ecológico fabricado a partir de residuos de madera. Ramón Rivero, dueño de la compañía, dijo en AIRE LIBRE FM que estos pequeños cilindros de biomasa comprimida son una alternativa eficiente y respetuosa con el medio ambiente, ideales para sistemas de calefacción en hogares y establecimientos industriales.

Rivero explicó que el proyecto comenzó en 2018, con el objetivo de aprovechar los residuos forestales. “Después de mucho esfuerzo, logramos adquirir una línea de fabricación de pellets, que compramos en China. Este proceso incluyó la venta de mi último auto y la ayuda de mi familia, así como la colaboración del aserradero”, recordó. Aunque han alcanzado logros significativos, Rivero enfatiza la necesidad de seguir avanzando: “Aún no estamos en óptimo, necesitamos apoyo para maximizar nuestro impacto”.

Los pellets son una solución eficaz para quienes no tienen acceso a gas natural. “No competimos con el gas, sino que ofrecemos una alternativa donde no hay suministro. Son fáciles de usar: un saco de 15 kilos puede durar casi todo el día”, añadió. Con un diámetro de 6 milímetros y longitudes que varían entre 1 y 3 centímetros, los pellets son completamente inocuos y se producen a través de un proceso industrial que no implica aditivos químicos.

El proceso de producción en Litoral Renovable es minucioso. La madera, que entra con una humedad del 30 al 50%, se seca hasta alcanzar un 10-15% de humedad, lo que es óptimo para la combustión. “El secado es crucial y requiere energía constante. Si hay un corte de energía, debemos actuar rápidamente para evitar problemas en el proceso de secado”, explicó Rivero.

La empresa actualmente utiliza un generador de 680 kilowatts para garantizar la continuidad del proceso, aunque el consumo real es de aproximadamente 300 kilowatts. Rivero confía en que la planta de energía local pueda generar suficiente electricidad para mantener en marcha sus operaciones, asegurando así la producción constante de pellets y evitando interrupciones que podrían afectar la calidad del producto.