¿Por qué el diputado Gastón Roma cambió su voto a último momento?

En una maniobra calificada como un “panquecazo” de última hora, el diputado del PRO y hasta entonces “pro vida”, Gastón Roma votó a favor de la ley que garantiza el aborto legal, seguro y gratuito en Argentina. Si bien se había manifestado públicamente en una marcha convocada por los sectores de la iglesia en Río Grande bajo el lema “Salvemos las dos vidas”, a la hora de la votación respondió a un llamado desde la corona. Roma escribió una carta con los motivos de su cambio. ¿Qué opinarán sus votantes luego de este giro que se contradice claramente con sus supuestas convicciones? ¿De ahora en más, peleará su resto de vida política más que por “las dos vidas”? 

AIRE LIBRE FM adelantó pasada la medianoche que tanto Roma como Héctor Stefani recibieron un llamado desde Secretaría General de la Nación. Fernando de Andreis les decía al otro lado que debían votar a favor, y así lo hicieron. Si bien sus “creencias o convicciones” decían estar en contra, la “magia” de la política lo pudo una vez más. Se cambió un panorama que parecía concentrarse en el pensamiento ortodoxo para dar media sanción a una ley que permitirá ampliar las opciones de las mujeres a la hora de decidir sobre su cuerpo. 

El voto de 129 a 125 no representa a esa casta presente en la Cámara de Diputados, claramente. Pero si representa al pueblo que esperó en las calles pacientemente hasta que los legisladores opinaron uno por uno durante un día. 

En aquella ocasión, cuando marchó por las “dos vidas”, el diputado por Tierra del Fuego agradeció la presencia multitudinaria de miles de vecinos  se movilizaron en toda la provincia bajo la consigna “si a la vida”.

En aquel momento, Roma había señalado que “dado el rango constitucional que tiene la protección a la vida desde la concepción, es jurídicamente imposible que el Congreso Nacional, y cualquier otro organismo nacional, provincial o municipal, público o privado, pueda sancionar la despenalización del aborto de una una persona por nacer, hoy protegida constitucionalmente desde la concepción”.

La carta de Roma tras su cambio:

El “por qué” de mi voto a favor

Con el fin de evitar cualquier tipo de confusiones, me resulta indispensable expresar mi posición respecto a la interrupción voluntaria del embarazo.

Luego de un intenso debate en el recinto, donde escuché a más de 150 oradores, quiero dejar en claro que mi posición a favor de la vida no sufrió modificación alguna.

En la votación en general decidí pronunciarme a favor del dictamen de mayoría ya que, luego de casi 24 horas de sesión, comprendí que lo mejor para sumar y enriquecer el debate era tomar esta postura y asegurar el acceso a políticas de salud pública para toda la sociedad.

No estoy de acuerdo con el proyecto presentado, es más, considero que es absolutamente perfectible y no da una solución concreta a los requerimientos actuales, pero como Diputado Nacional tengo la responsabilidad y el deber de legislar para la sociedad en su conjunto.

Entiendo que esta discusión, la cual nos atraviesa transversalmente ha afectado una fibra muy sensible de cada uno. Sin embargo, creo que nos ha hecho crecer como sociedad, madurar y posicionarnos sobre cualquier causa individual, generando cohesión y apuntando, fundamentalmente, a la consolidación de políticas responsables que trasciendan las distintas generaciones.

Quiero destacar que aquello que me llevó a reflexionar respecto a mi anterior decisión recae absolutamente en el debate y en la aceptación de un flagelo social existente e innegable. Si bien mis principios rigen siempre en mi ser, éstos no son la verdad absoluta, por lo que asumo la responsabilidad de apoyar el dictamen de interrupción voluntaria pero manteniendo firme aún mi postura contra la legalización plena de la misma.