Peque Valle, una vida entre el teatro y la música

Es docente, actriz y directora de teatro. Peque Valle nació en Punta Alta, y estudió teatro en la ciudad de La Plata. Por razones personales se mudó a Río Grande en 1993, y allí comenzó una inmensa tarea en el ámbito de la cultura fueguina. Enseñando teatro y cantando en el inolvidable grupo musical Tauen, entre otras actividades que la hicieron crecer como persona. Habló con AIRE LIBRE FM y contó parte de su historia.

“En La Plata una época muy particular, que era una de las pocas loquitas que se les ocurría estudiar teatro. La época dura que vivió nuestro país. Pero bueno, me fui para allá a estudiar en el 78, plena dictadura militar. Que yo estaba como trabajando en teatro y demás, y era como que uno se sentía perseguido sin hacer nada. Pero bueno, fue una época muy particular que vivimos todos. Hay historias familiares de que yo cantaba y actuaba sola frente al espejo o frente a mi familia. Siempre tuve como esa inclinación que por suerte se me dio y la pude llevar a cabo, un sueño cumplido”, recordó Peque.

Luego relató que “en principio yo lo que quería era ser actriz y punto. O sea, era lo que yo quería ser. Así que estudié cuatro años de preparación del actor. Pero después me di cuenta que tenía el título de, entre comillas, actriz. Y el campo de acción era muy acotado. Iba a los canales y qué sé yo. Bueno, toda una época de juventud donde yo intentaba hacer cosas. Entré en crisis. Porque digo, tengo algo bajo el brazo que es mi título y ahora, ¿qué hago con eso? Y siempre con mi gran amiga del alma, mi mejor amiga, que es Cristina Ademo, que se dedicó al teatro también, y ambas estudiábamos juntas, un día charlando dijimos, bueno, basta de entrar en crisis. Lo bueno de esto es hacer lo que uno quiere. Aunque tenga el apoyo económico de un trabajo, no sé, de otra cosa.
El teatro no nos da plata, pero nos da felicidad. Y fue un clic que hizo mi cabeza y así fue que tomé esa actividad como algo que me hace bien al alma. Terminé eso, después estudié maquillaje teatral, me apasionó esa carrera. Y después tuve la suerte de que se abriera la carrera de docencia. La escuela, mi gran amada Escuela de Teatro de La Plata, que se abrió la carrera de docente, así que enganché yo ahí y fui la primera promo de esa escuela”.

Recordamos tu paso como docente en Río Grande…

“Llegué acá por el año 93, yo venía haciendo mucho teatro en La Plata, en grupos independientes y demás. Extrañaba mucho eso los primeros tiempos acá, ¿no? Vine por una cuestión familiar acá en Río Grande. No fue que lo elegí porque acá había un campo de acción en teatro. No había casi nada en aquella época. Así que bueno, arranqué en Inti Anti, me acuerdo, con Mónica Madoni, que era un centro para chicos recreativo, cultural, hermoso, hermoso lugar. Y después bueno, por suerte la Universidad Tecnológica, a la cual todavía pertenezco desde aquellos años, desde el 94, me dio la posibilidad de dar talleres de teatro, que son los talleres que hasta hoy siguen.
Empecé a trabajar en los colegios secundarios con mi título de docente y especialmente en el CIERG. Ahí arranqué como docente y en distintas escuelas del Estado, hasta el día en que me jubilé, que fue en el año 2019. Trabajando como docente de Teatro como espacio curricular en las escuelas, y en los talleres de teatro de la universidad, en realidad un espacio completamente diferente, porque los que van, van por elección, porque les gusta el teatro, porque quieren ser actores, actrices, o simplemente quieren descubrir un nuevo mundo, ¿no? Que bienvenido sea descubrirlo, porque si te gustó, con toda seguridad vas a volver. Siempre digo lo mismo”.

¿Qué se puede descubrir asistiendo a un taller de teatro?

“Creo que descubrís cosas que ni vos sabés que las tenés.
Es un código muy particular. ¿cómo lo descubrís? En realidad entregándote al juego, entregándose cada uno a hacer lo que siente y a decir lo que siente. Yo digo, por un lado descubrís eso, ¿no? Te conoces más, te descubrís, reconoces cosas. Pero siempre digo que vos en esas actividades, siempre estás siendo vos. Lo que pasa es que en ese espacio tenés la posibilidad de serlo, ¿me entendés?
Es ahí donde vos te descubrís, te redescubrís y despertás en un espacio que no sabía que existía. Yo invito a todo el mundo, puede que no te guste, puede ser, pero en general es un espacio que ayuda al ser humano. Siempre voy a repetir siempre lo mismo: El teatro salva, como digo yo. Es un espacio que salva al humano, al ser humano. Te salva para la vida, te ayuda a crecer, a evolucionar, a ser creativo. Te abre la cabeza, es así, es maravilloso”.

¿Cuál es la diferencia de ir a un taller de teatro, como alguien que quiere aprender cosas, y ser espectador de una obra de teatro?

“La diferencia es que hay alguien que te está contando y hay alguien que está recibiendo un mensaje. No es lo mismo. No es lo mismo. Absolutamente nada que ver. La riqueza del que está en el escenario o en el espacio escénico te está entregando su vida, su creación. Todo lo que está haciendo es pura y exclusivamente para el que está sentado ahí recibiendo algo, que lo lindo sería que en realidad esa persona, ese espectador, salga completamente distinto a como entró, que se lleve algo. Si cambió algo en su pensamiento, mejor aún”.

Y en usted que es la profesora, ¿también aprende cosas?

“Sí, siempre, es permanente. Sí, totalmente. En imágenes, en reacciones, en los diálogos, en la conexión que hay entre ellos”.

¿En su caso particular, desde que comenzó en el teatro en La Plata y hasta la actualidad, ¿en qué la mejoró como persona?

“Qué pregunta tremenda. Yo creo que uno va evolucionando a través de los años. Y yo creo que uno, a través de los años, con el tema del teatro, yo me he vuelto menos egoísta.
Mirá lo que te estoy contando.
Digo egoísmo porque a veces uno no se quiere mezclar, no se quiere juntar, no se quiere qué sé yo, yo tengo mi campito, tengo mis conocimientos. Y la verdad que la vida me ha enseñado que de la única manera que uno se supera es uniéndose, siendo todos un todo para seguir adelante, de verdad. En ese punto cambió un montón. Porque antes pensabas en vos más que nada. Claro, estaban estas cosas que todavía siguen pasando y entiendo que… Ah, porque yo me creo revolucionada. No, no es así.
Creo que el hombre debe evolucionar para bien. Y todavía siguen habiendo estos espacios, y no solamente en teatro, te hablo en distintos ámbitos, música, teatro, qué sé yo, pintura, lo que sea. Hay como que se cierran en que uno es uno y no nos mezclemos. Y me parece una tontera porque en realidad se crece justamente en el intercambio. Y uno sabe dónde está parado cuando vos sabes cómo está el otro. Si no, no sabes dónde estás. Y eso te va a ayudar a superarte”.

Eso pasa en todos los ámbitos.

“Sí, por eso debería cambiar. Es como que a veces pensamos, bueno, me junto con la persona que piensa como yo. Y a veces, claro, porque en el disenso está la riqueza y la evolución de uno. Totalmente”.

¿Qué pasa con la música en su vida?

“La música formó tremenda parte de mi vida durante diez años. Gloriosos diez años del grupo Tauen. Hermosa música que hacía Tauen. Una hermosa música, yo la tengo en mi celular, cada tanto escucho. Sí, porque marcó una etapa maravillosa de Tauen. Era muy original para mí. Tenía esa cosa particular de mucho ensayo detrás, muchas horas de ensayo. Ensayo y error para superarse, no hay otra fórmula.
Fue una etapa muy linda de diez años, pero ahora no puedo cantar ni nada. Porque tengo rinitis crónica, una alergia tremenda que empecé a tratármela y cuando empecé a cambiar la voz dije, me dedico al tango. Que amo el tango”.

Por último Peque, hablemos de estos talleres de Teatro en la UTN.

Tengo tres grupos. Un grupo de avanzados que hace un montón que vienen conmigo. Así que ellos los tengo como aparte. Y después tengo dos grupos más. El de adolescentes, que son los días lunes a las 6 de la tarde. Y el otro grupo abierto de adultos son los sábados a las 4 de la tarde.
Es en la universidad, viste que en la universidad tenés primaria, secundaria, tenés todo.
Así que invito a toda la gente que tenga o que no tenga experiencia, que quiera probar, que quiera saber y descubrir este mundo. Yo los invito, así que los espero”.
() Aire Libre FM 96.3: