Familia de la joven agredida, continúa reclamando en “Maldito Ibiza”

En la noche de este sábado, familiares y amigos de Micaela, la joven afectada en el reciente incidente en el boliche Maldito Ibiza, protestaron. Solicitan que se esclarezcan los hechos. AIRE LIBRE FM dialogó con Belén, la hermana de la victima, quien compartió su indignación y sus demandas de verdad y justicia. La familia asegura que las imágenes difundidas por el establecimiento “son incompletas”.

“Me gustaría que también publiquen el video donde sacan a mi hermana de las instalaciones hacia afuera. Que no seleccionen solo lo que les conviene, pero no muestran el momento crítico cuando la sacan arrastrando fuera del boliche”, expresó Belén.

La salud de Micaela sigue siendo motivo de preocupación para la familia. “Ella está con mucho mareo, vómito, cefalea, dolor en el rostro, y todavía no puede ver con el ojo derecho. Está en un estado crítico de salud”, añadió Belén, describiendo la difícil situación por la que atraviesa su hermana.

En cuanto a la respuesta del local, la familia denunció la falta de apoyo y comunicación. “Ellos se comunican con mi papá que vive en el norte, después de que yo salí a informar de que no se habían acercado en ningún momento. Ni siquiera preguntaron cómo estaba”, aseveró Belén.

La indignación de la familia se extiende a la clausura del boliche. “En teoría, levantaron la clausura ayer. La verdad es que no sabemos qué decir al respecto”, comentó Belén, señalando la confusión en torno al estado actual del establecimiento.

La familia planea tomar acciones legales y ha tenido contacto con testigos dispuestos a declarar. “Vamos a realizar las acciones legales correspondientes. Después tendremos que esperar los tiempos de la justicia”, afirmó Belén.

Ante la falta de comunicación de las autoridades, Belén criticó: “Ni la fiscalía ni la municipalidad se han comunicado conmigo. Ni siquiera con respecto a la clausura o a la habilitación del lugar”.

La familia, además, tiene la intención de investigar la habilitación municipal del establecimiento. “Son dos causas paralelas, una clausura municipal y la otra la causa judicial. Vamos a acercarnos al municipio para obtener explicaciones sobre la habilitación sabiendo que había irregularidades laborales”, dijo Belén.

En un tono firme, Belén concluyó: “Para mí, la condena social es la peor. Quizás en la justicia no ganemos nada, porque sinceramente no tengo fe en ella. Pero no vamos a dejar de luchar y de hacer público lo que realmente sucedió”.