Día 2: Los inicios de la economía rural

Hoy vamos a contar como fue el surgimiento de la estancia fueguina, ya en 1885 encontramos el origen de esta unidad productiva que se constituyó como modelo económico hegemónico de la zona norte de Tierra del Fuego por más de un siglo y que será el motor del caserío de Río Grande.

La implementación del modelo económico de la estancia se materializa de la mano del comerciante asturiano José Menéndez que arribó a la ciudad de Punta Arenas (Chile) desde hacía unos años. A través de sus influencias políticas y artilugios económicos se hizo propietario de la estancia San Gregorio. Y comenzó a adquirir tierras argentinas a través de la compra de lotes al estado nacional y a particulares como fue el caso de Eduardo O¨Connor.
A fines de 1894, Menéndez se hizo de 80.000 hectáreas más, de tierras que habían pertenecido a la concesión de Julio Popper ( que salieron a remate luego de su muerte).Llegando a 140.000 hectáreas en muy pocos años.

Menéndez consideraba que “… estas tierras resultan pastosas en alto grado, bien aguadas, accidentadas, abrigadas, buenas y hasta magníficas, con lugares espléndidos.” siendo la base para la fundación de este modelo económico.
Así podemos identificar la estancia “La Primera Argentina”, ubicada en la margen derecha del Río Grande que llegó a albergar 140.000 cabezas de ganado ovino.

Tres años más tarde se consolidó una segunda gran estancia de Menéndez conocida como La Segunda Argentina. De mayor extensión que la anterior; en sus casi 200.000 hectáreas llegó a mantener hasta 160.000 lanares y a poseer el galpón de esquila más grande del mundo.
Ya iniciado el siglo XX, en 1904, adquirió tierras en la margen sur del Río Grande, dando lugar a otra estancia de 125.000 hectáreas: La Tercera Argentina.

Considerando la superficie que abarcaban estas estancias podemos decir que las familias propietarias – Menéndez-Behety; Braun- Menendez; Montes- Thurler; Braun-Nogue y Bridges- construyeron un gran oligopolio en el confín de Argentina, concentrando la propiedad de casi medio millón de hectáreas en Tierra del Fuego. y con ello delinearon la matriz económica de casi medio siglo de nuestra historia.
Hoy podemos registrarlas como Estancia Menéndez, Estancia María Behety, Estancia Sara, Estancia Cullen, Estancia San Pablo y Estancia Santa Ana entre otras.

A fines del siglo XX, encontramos que una buena parte de estas tierras rurales fueron vendidas por los estancieros al Municipio de Río Grande en función a las demandas del explosivo crecimiento del casco urbano.
Analizando este último proceso se puede advertir que se produjo un cambio en la actividad económica de estas familias terratenientes, ya que pasaron de priorizar una activada ganadera-rural a una especulación inmobiliaria a través de la renta de la tierra.

 

 


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