(AUDIO) Una joven relató un intento de secuestro en Río Grande

Cecilia Boturri en los estudios de AIRE LIBRE FM.

El intento de secuestro de Cecilia Botturi (19) se viralizó desde este lunes por la noche en las redes sociales. En el mensaje dice: “El 15 de mayo a las 21.15 en Espora y Obligado quisieron secuestrar a una chica dos hombres en un gol negro modelo viejo, uno de ellos pelado con sobrepeso y el otro barba larga, por suerte gente que presenció lo que pasaba se involucró e impidieron que estos sujetos pudieran subir la chica al auto y se dieron a la fuga”. Este martes, Cecilia brindó su versión en AIRE LIBRE FM luego que un jefe de la Comisaría Primera, afirmara que no existen registros –previos a la denuncia formal que hizo acompañada por su familia- de su paso por esa dependencia, ni en los papeles ni en las cámaras de vídeo.
Acompañada por su padre, Alberto Mendoza, contó cómo ocurrió el intento de secuestro. “Yo salía de trabajar como todas las noches, 20.30 de mi trabajo, anoche no hice el recorrido habitual que suelo hacer porque acompañé a una compañera, me despedí de ella, caminé dos cuadras más y ahí se dio el hecho. Yo iba por Obligado casi llegando a Espora, a dos cuadras de mi casa”, comenzó.

Cecilia cuenta que iba sola, caminando sin teléfono encima, cuando pasa un gol negro modelo viejo de cinco puertas, que estaciona unos metros delante de ella. “Se bajaron dos muchachos y vienen corriendo hacia mí, pero no me agarran de frente, pasan de atrás mío y me agarran de atrás, uno de cada lado”, afirmó.
“En fuerza claramente me sobrepasaban, mis cosas quedaron en la calle, o sea que la intención de estos hombres no era robarme. Como pude forcejeé, lo que uno puede hacer, grité al principio y pedí ayuda pero después no me daba el cuerpo y no me daban las ganas, no sabía qué pensar en ese momento”, siguió.

Eso ocurrió “hasta que un hombre en una camioneta negra comenzó a tocar bocina, el hombre frenó y se quedó mirando la situación, en ese momento aplicaron mayor fuerza en mí, ya me habían tirado al piso y me llevaban arrastrando al auto. Y al rato aparece otro auto, era una familia en un S4W marrón brilloso oscuro, este señor se baja a la par del otro de la camioneta negra, agarran a estos hombres y los empujan contra el auto liberándome a mí. Uno me dice que salga y aparece la mujer de este señor que me levantó mis cosas. Era gente que me estaba ayudando, la mujer me ayudó a subir al auto la mujer y cuando me di cuenta lo que estaba pasando y levanté la mirada y el gol ya no estaba, la camioneta del otro señor se estaba yendo pensé que a la persecución del gol”.

Cecilia cuenta que los dos hombres que intentaron secuestrarla “en ningún momento me hablaron, pero si me hacían presión para llevarme, era forcejearme hasta cargarme en el auto, estuve cara a cara con la puerta en la parte trasera del auto, que tenía un bollo en el lado derecho entre el foco de luz de atrás”. De hecho la joven tiene marcas en el pecho, en la zona de las axilas y en las muñecas.

¿Cómo eran los hombres que la atacaron? “El conductor tendría unos 40 o 50 años alto, corpulento, era morocho con pelo ondulado hasta los hombros y adelante toda una barba, con un aspecto a primera vista nada agradable. El acompañante era bajo con sobrepeso, más joven de unos 35 años, rasgos grandes. Nada fuera de lo normal, no eran tatuados o con piercings, que es lo que hoy en día se ve sospechoso. Eran dos personas normales, no tenían rasgos que vos decís me van a hacer algo, por eso no pensé y seguí caminando, estoy segura que si los veo los reconozco”, asegura.

Con la familia que la rescató dice que tuvo mucha charla. “No querían meterse, se notaba que no querían comprometerse, simplemente me preguntaron si los conocía y de dónde venía, nada más que eso”.

Esa pareja junto a su hijo pequeño la llevaron a la comisaría. “El hombre se quedó en el auto porque tenían un nene de unos tres años, la mujer se baja conmigo y ahí es donde vamos a la comisaria. Cuando le quiero decir al Policía que estaba en la ventanilla me dice, ´bueno, está bien, aguardame un momento´ se fue y volvió al rato. Me pidió que cuente brevemente lo que pasó, lo conté, buscó un papel cualquiera, y me dijo ´fírmame acá´ y a la señora ´fírmame acá y se pueden retirar´. Eso fue todo. No anotó nada, sinceramente no sé qué hizo, era un papel común y corriente”, relató.

“Sé que hice mal en no darme cuenta de cómo estaban actuando conmigo, tendría que haber hecho algo, pero estaba en shock y no sabía cómo eran los pasos de todo esto”, reconoce la joven.

Luego contó que la señora que la acompañó le explica que se tenía que ir. “Les agradecí, el auto se fue y salió un muchacho joven que me dice ´vamos que te llevo a tu casa´ en un patrullero”. “Cuando llego me doy cuenta de lo que me pasó y avisé a mis padres que actuaron más que rápido”, contó.

Miguel, su padre, se sumó al relato de Cecilia y señaló que “cuando la vemos con las lastimaduras que tenía le preguntamos qué había pasado en la comisaría, atinamos a ir a la comisaria los dos solos. Cuando llegamos ahí supuestamente habían cambiado la guardia y nos dicen que no tenían ninguna denuncia del hecho”.

“Volvimos a casa a buscarla y la llevamos a la comisaria, ahí recién nos toman la denuncia, estuvimos desde las 10 de la noche hasta las seis de la mañana y en el medio fuimos al Hospital”, sumó.

Para el padre de la joven “los que estaban para el cambio de guardia no hicieron nada, porque faltaban cinco minutos para irse y cuando ella llegó era el cambio de guardia, no lo habrán hecho para no trabajar, es lo único que nos queda para pensar”.

De hecho añade que desde la Policía “nos dijeron que vayamos luego para mostrarnos los videos de cámaras, y cuando llegamos ya las habían visto y no tenían nada, pero nosotros nunca pudimos verlas”.

La familia incluso reclamó que se haga presente la guardia anterior porque ella puede identificar al oficial que estuvo antes “pero nunca los llevaron”, señala.

Finalmente la joven contó que “varias veces me ha pasado de tener acosos en la calle, que te dicen cosas, te persiguen con los autos, me ha pasado pero nunca así; mis papás lo saben y es horrible que te pase esto”.

Además lamentó que no se haya esclarecido su primer paso por la Comisaria. “La policía dijo todo otra cosa, yo nunca dije que eran cuatro hombres, dije que eran dos” cerró y agregó que “no hicimos la denuncia en la fiscalía pero lo vamos a hacer ahora, también esperamos que aparezcan los testigos que me llevaron”.



(AUDIO) Aire Libre 963: