La indignación de un padre: “Me dijeron que si tenía suerte, me atendía un médico”

Leandro expresó en AIRE LIBRE FM su indignación por la atención que recibió su hija en el Hospital Río Grande, cuando la trasladó allí por temblores y debilidad que empezó a sufrir en la madrugada del pasado domingo. A pesar de realizarse estudios, no se detectó la causa y enfrentó dificultades para acceder a un neurólogo, destacando problemas en la atención pública. Debió trasladarse a una clínica privada.

El vecino señaló que “lo sucedido fue en la madrugada del domingo, y fuimos al hospital en el transcurso de la mañana para ver si podía tener atención médica. Me atienden en la guardia. Ella había comenzado con temblores en sus manos y le costaba, en algunos momentos, tenerse en pie, cosa que nunca había sucedido. Entonces, la atienden en la guardia. Cuando la estaba atendiendo en la médica de guardia, me explica que se iban a hacer unos estudios de sangre, una tomografía de cabeza, y cuando terminamos de hacer todos los estudios, bueno, me dice, ya dieron todos los estudios perfectos. Lo llegué a decir que había un neurólogo. Bueno, le pregunto cómo tenía que hacer para dar el neurólogo. Me ha dicho, primero tenés que ver a un médico clínico para que él te derive. Le pregunto si ella, al ser clínica, no lo podía detectar, viendo la situación de mi hija, desconocer cuál era la causa de esos temblores. Me indica que no, que no es posible, que tengo que saltar un turno con un clínico y que recién él ahí iba a derivarme al especialista del neurólogo”.

Luego le consulté “¿cómo tengo que hacer para ver al clínico para sacar un turno? Ah, mira, me dice, lo veo difícil porque se dan pocos turnos. Mi respuesta fue que es una broma, porque básicamente me está diciendo que tengo que tener suerte para que la atienda un médico. Ahí me explica que la única neuróloga que está en el hospital estaba de vacaciones, situación súper entendible que yo, claro, en mi post, en el escrito que hago, pero es complicado para un padre, en una situación del nerviosismo, recibir como mensaje que tenés que tener suerte para que te la vea un médico cuando te la derive a otro, cuando el que te está hablando ya es un médico clínico.

“Me respondió que se daban pocos turnos, están muy saturados. Bueno, pero, ¿cómo continúo? Porque si no está el neurólogo. Claro. El médico, tengo que tener suerte, tengo que pelear para que, ante una situación que el mismo médico no se conoce cuál es la causa, tengo que estar yo sorteando cuestiones azarosas para conseguir un turno. Más allá del desconocimiento que uno tiene de la medicina, es decir, por lo menos decime que sabes que no es grave lo que está apareciendo en mi hijo y que puedo operar, pero ni eso”, apuntó.

Mencionó que “ahora estamos ahora haciendo estudios en el CEMEP y tratando de conseguir un neurólogo. Gracias a la publicación hubo un montón de gente que se complicó, nos pasó el número de neurólogos particulares. Yo porque tengo la posibilidad económica de afrontar esa situación, pero hay un montón de otras personas, de vecinos que no están en esa situación, en esa posibilidad. Hoy por hoy, mi hija, se le han hecho un gran cantidad de estudios, hasta ahora no se pudo detectar cuál es la causa de esos temblores que de las manos se extendió a todo su cuerpo a lo largo de convulsiones”.

¿Su hija ya había tenido esas convulsiones antes o nunca?

“No, nunca tuvo ningún tipo de síndrome similar a estos. Comenzó este domingo a la madrugada y de ahí fue progresivo hasta hoy. Incluso acá en el CEMED los médicos neurólogos son itinerantes, así que la vio un neurocirujano, quien me volvió a indicar que la vería un neurólogo, así que ahora gracias a la comunidad, a la gente que se comunicó con nosotros, ya me voy a poner en contacto con algún particular para poder ver si pueden hacerle los estudios que requiere ahora”.

¿Y ahora cómo se encuentra ella, su estado de salud?

“Está estable, está más medicada para evitar estas convulsiones, estos temblores, pero bueno, mi hija es portadora de Síndrome de Down así que ella se pone nerviosa simplemente cuando tiene estos episodios, pero dentro de todo contenida”.

Por último, comentó que “soy afiliado a la OSEF, pero pago una prepaga, yo tengo la capacidad hoy por hoy de poder pagar una prepaga, porque todos sabemos la situación en la que se encuentra la obra social de los estatales”.

() Aire Libre FM 96.3: