Regresó al país la imagen de la Virgen de Luján, que estuvo en Malvinas

Regresó al país la imagen de la Virgen de Luján, que estuvo en la guerra de Malvinas luego de permanecer 37 años en una catedral británica. La imagen que acompañó a los soldados argentinos durante el conflicto bélico llegó esta mañana al aeropuerto de Ezeiza, donde fue recibida con honores.

La trasladaron a la catedral británica en memoria de los caídos durante el conflicto bélico, sin banderas, patrias ni distinciones. Debajo de la santa patrona, una placa negra explicaba en inglés: “Los argentinos invadieron las Islas Malvinas en 1982 y llevaron con ellos esta estatua de Nuestra Señora de Luján. Después de su rendición dejaron la imagen con el prefecto apostólico de las islas, monseñor Dan Spraggon. Él se la presentó al padre Alfred Hayes, quien estaba con las fuerzas británicas a lo largo de la campaña”.

Cuando Daniel Doronzoro, fundador y presidente del grupo “La Fe del Centurión”, de la diócesis de Quilmes, encontró en un recorte periodístico la historia de su traslado contada por el médico militar inglés James M. Ryan, motorizó las gestiones para su repatriación. La causa involucró al obispado castrense, la diócesis que nuclea a las Fuerzas Armadas y a las fuerzas de seguridad: el monseñor Olivera le envió una comunicación formal al obispado británico.

El obispo Paul James Mason aceptó la restitución de la Virgen y en retribución y en señal de gratitud, las autoridades argentinas ofrecieron entregarles una réplica de la imagen. Monseñor Mason calificó el traspaso como un signo de conexión, fe compartida y buena voluntad pacífica entre ambas naciones, y Monseñor Olivera, lo describió como un símbolo de fraternidad, de diálogo y respeto. El intercambio se realizó el 30 de octubre en el Vaticano: el papa Francisco bendijo ambas imágenes.