DIA 39: Traslado del Batallón de Infantería N° 5 a Río Grande

Por Decreto N.º 1397/62, rubricado por Frondizi, considerando que el Batallón de Infantería de Marina N.º 5 venía funcionando con distintas denominaciones desde el año 1947, sin tener decreto de creación oficial; se crea el Batallón de Infantería de Marina N.º 5.(BIM 5)
El 26 de junio de 1947, se asienta en la ciudad de Ushuaia un Destacamento de Vigilancia y Seguridad de la Gobernación Marítima de Tierra del Fuego y una organización correspondiente al Batallón de Infantería de Marina.

En el año 1952, el asiento de la Unidad fue trasladado definitivamente desde la Base Naval de Ushuaia a los cuarteles de Infantería de Marina de Río Grande. A los efectos organizativos, la Unidad pasó a depender en lo que concierne a lo técnico-administrativo del Comando General de la Infantería de Marina y operativamente, del Comando del Sector Sur de la Zona Naval Marítima.
El personal asignado a la Unidad fue de 11 oficiales de Infantería de Marina
2 suboficiales, 11 cabos, 2 marineros y 261 conscriptos.

En 1953, con el incremento de efectivos a alojar en la Unidad, y la necesidad de contar con los espacios adecuados, comenzaron las obras con personal de la Marina para readecuar las instalaciones: despachos, cuadras, servicios, pañoles, entre otros.
Con estas instalaciones el B.I.M 5 se incluye a la vida urbana, prestando servicios a su población. En 1953, adquiere la línea telefónica en la Guardia y en el alojamiento del oficial de guardia. En 1954, se acoplan los servicios de la red de agua potable. En 1955, comienza a funcionar dos grupos electrógenos de la usina eléctrica del Batallón. Entre 1959 y 1960, se inician las obras de conexión de la red de distribución de gas domiciliario a las distintas dependencias de la Unidad.
En agosto de 1960, se comenzó a fabricar pan para el Batallón en las instalaciones de la Misión Salesiana, con insumos propios y personal militar. En 1962, la panadería comenzó a funcionar en la Unidad Militar. Con esta nueva infraestructura, el Batallón ofrece un servicio para la comunidad, proveer de pan a las escuelas apadrinadas, lo que permitía atender la merienda de los estudiantes. También, se ofrecía pan al costo a las instituciones de bien público, como el hospital.

En 1962, se crea oficialmente el B.I.M. Nº 5, Además, se agrega el vocablo de “Escuela”. La Unidad pasó a depender del Comando de la Sub Área Naval Río Grande, en forma operativa y del Comando de la Fuerza de Infantería de Marina Nº 1, como Unidad Subordinada.
En el año 1968, se modifican las dependencias operativas, al Comando del Área Naval de Ushuaia y a partir del 1º de julio del mismo año, de la Fuerza de Infantería de Marina Nº 1. Estas modificaciones, también mutan la cantidad de personal, aumentando de 287 en el año 1954 a 713 en el año 1969.
En 1972, se trasladó al B.I.M Nº 5, la Compañía de Infantería de Marina “Obra”, que se encontraba en la localidad de Ushuaia.

Así el B.I.M. Nº 5 queda conformado de la siguiente manera:
Una Compañía de Comando y Servicios,
tres compañías de Tiradores y una Agrupación Servicio Cuartel
Para el año 1982, año relevante para el B.I.M. Nº 5, contaba con un personal de 910 militares.
Entre los servicios ofrecidos por el B.I.M. Nº 5, se pueden citar, la provisión de pan, ya mencionado con anterioridad, el plan de lucha contra incendios, obras de infraestructura urbana, planes de acción comunal, apoyo escolar, colaboración con el sistema de salud, participación en campeonatos deportivos y culturales, entre otros.
Durante el conflicto de Malvinas, 1982, tuvo un destacado rol. Estuvo atrincherado en el Monte Tumbledown, en la Isla Soledad. La Aviación Naval, estaba asentada en Río Grande, lo que mantenía en jaque al ejército inglés. El mando británico, ante esta situación, tenía planificado poner en marcha un golpe comando sobre la ciudad de Río Grande, al estilo raid israelí, para averiar los aviones argentinos y asesinar a los pilotos, misión que fue lanzada y finalmente cancelada. Esta situación puso en alerta tanto al Batallón como a la ciudad y a la población civil.
La participación de la Unidad Militar en el conflicto bélico fue fundamental en lo concerniente a las acciones aéreas y en la resistencia final, ya que fue la última unidad en rendirse en el archipiélago.

(🎙) Aire Libre FM 96.3: