El hombre apuñalado con el irreversible diagnóstico: Muerte cerebral
Se diagnosticó muerte cerebral para el hombre apuñalado en Río Grande, a tres días de haber sido atacado violentamente a golpes y cuchillazos, junto a su hijo de 14 años. Alberto Scariot no logró reponerse de las graves lesiones sufridas. El joven señalado como autor del hecho, Fernando Moreira (22), enfrenta ahora un delito que contempla penas de 8 a 25 años de prisión, y este viernes será indagado.
A Alberto Scariot, de 40 años, se le declaró muerte cerebral, tras permanecer internado en la Unidad de Terapia Intensiva del Hospital Regional Río Grande, desde el lunes último.
El vecino riograndense había sido atacado junto a su hijo de 14 años durante la madrugada del 10 de noviembre en la calle Yaktemi al 400, en el barrio Los Cisnes. El hecho ocurrió alrededor de las 5, cuando personal de la Comisaría Quinta fue alertado sobre la presencia de un adulto con lesiones sangrantes y de un menor golpeado en la vía pública. Al arribar, los efectivos constataron que se trataba de Scariot y su hijo, quienes habían sido agredidos con un arma blanca tras una discusión que se inició en el interior de una vivienda y que continuó en el exterior.
De acuerdo con la investigación, la disputa fue escalando hasta que Fernando Aaron Moreira, de 22 años, atacó con un cuchillo a Scariot y al menor, quien había reaccionado activamente para defender a su padre. El adulto sufrió múltiples heridas cortopunzantes en el tórax y el cráneo, por lo que fue trasladado de urgencia a la guardia del HRRG donde fue intervenido quirúrgicamente para luego quedar alojado en el sector de terapia intensiva. Pese a los esfuerzos médicos, en las últimas horas se confirmó su muerte cerebral.
Scariot permanece conectado a un respirador, mientras el Juzgado autorizaba el retiro del soporte vital y se activaba el protocolo para la donación de órganos, con intervención del INCUCAI.
El menor, en tanto, sufrió lesiones de escasa consideración. Tras la agresión, el atacante se dio a la fuga en un vehículo, pero fue localizado poco después por personal policial en inmediaciones de la calle Piedra Buena al 1.700 y quedó detenido.
Moreira se negó a prestar declaración indagatoria y fue inicialmente acusado por tentativa de homicidio, calificación legal que fue modificada a homicidio tras confirmarse el deceso cerebral de la víctima.
